Opinando sobre...

30/8/2013

Fiestas y política, una relación sin sentido

Una vez reposada la resaca de tantos días de fiesta, toca hacer el típico balance. Pero este año no ha sido uno más. Días antes del comienzo de Aste Nagusia, la "fiesta" ya estaba montada gracias al Delegado de gobierno, Carlos Urquijo,y su discrepancia por la elección de la txupinera.Todo ello provocó aquello que tanto detestan los propios bilbainos;la politización de fiestas.Que si Jone Artola, txupinera 2013 elegida pro Bilboko Komparsak, era portavoz de asociaciones proetarras, que si estaba en las listas electorales de un partido ilegalizado....Con esta presunta clara vinculación con el grupo terrorista se decide vía tramite judicial eliminar a Jone de su puesto representativo en fiestas. No se puede tomar estas decisiones y alardear de estar en contra de politizar unas fiestas populares. Si se demostrase que Jone tiene antecedentes penales vilculados al terrorismo o algún delito, seguro que todos los ciudadanos entenderían que no se puede considerar la mejor representación para unas fiestas tan importantes como las de Bilbao y su importacia en el resto del Estado y extranjero. La situación fue de lo más extraña ya que fue considerada no apta para el puesto tras su nombramiento y presentación a medios de comunicación, unos quince dias antes del comienzo de Aste Nagusia. ¿Nadie investigo a Artola desde el anunciamiento al Ayuntamiento hasta días antes de la presentación oficial?. Hay quien considera un burdo intento de cubrir con un escandalo otros poblemas importantes en ciertos partidos políticos.... Pero de todas formas, lo que debe quedar de todo este follon es el gran espíritu festivo del pueblo, el verdadero protagonista de la semana grande bilbaina y el mejor embajador de nuestra tierra. Señores políticos, no nos politicen más las fiestas, son momentos en que la gente se reune para poder disfrutar del buen tiempo, buena gente, buena música y bebida de garrafón, sin distinción de ideologías políticas. Salgan y vivan las fiestas populares sin pensar en nada más, es una asignatura pendiente para el próximo verano, señores. 


19/05/2013
Consejo vendo y para mi no tengo
Ante los recortes en sanidad, educación y en ayudas sociales, llega el nuevo invento del gobierno actual: sencillos pasos para ser un gran ciudadano. Y no son consejos prácticos para ser un gran ciudadano para saber llegar a final de mes con una ayuda de 400 euros una familia de cuatro personas, ni de cómo apañárselas para conseguir un puesto de trabajo en un mercado de ofertas inexistentes. Nada de eso. Es mucho mejor y más práctico. Vía televisión pública, nos han mandado unos mensajitos a los ciudadanos:Rezar puede ser una gran solución a nuestros problemas laborales o enseñarnos la forma correcta en que tiene que vestir una chica. A pesar de que el NO-DO fue eliminado hace unos cuantos años, podría considerarse a estos "consejos prácticos" una vertiente evolutiva del noticiario franquista.
Todo ello nos hace plantearnos, ¿Para qué sirve al final la televisión pública? Para crear un mundo paralelo de una situación real degradante. Ya sabíamos que el gobierno, tanto como cuando está uno u otro partido político, manipulan claramente la información que transmiten las televisiones públicas, pero debería establecerse unos límites infranqueables. Se puede entender que quién mande resalte sus aciertos, aunque sean escasos, y repitan varias veces para destacar las equivocaciones del resto de grupos políticos. Pero en la situación en la que vive actualmente este país, en el que se pide, o mejor dicho, se exige de forma educada a cada uno de los habitantes a arrimar el hombre, apretarse el cinturón más y esperar a que todo mejore. Los ciudadanos de este país no están para recibir lecciones de formas de vida, si no de ser ayudados al máximo. Dejen de dar consejos a la gente, porque seguramente, más de seis millones de personas podría dar a los políticos un master de supervivencia en la vida. Ese si que sería un buen curso para la sociedad.




6/5/2013

Reflejos en el espejo, lectura para la reflexión de la vida


¿Cuántas veces nos pasa en la vida que necesitamos detenernos y darnos cuenta de lo que nos rodea?. Hay quienes pueden elegir el momento para poder reflexionar, y hay quienes la vida misma coge las riendas de tal elección para enseñarnos una lección de sabiduría.

Daniel Santos es un joven que su mayor objetivo en la vida es ser jugador de baloncesto profesional y que en realidad su vida transcurre sin pena ni gloria, pasando los días con sus dos amigos Oscar y en Enrique en Fuenlabrada. Pero un día la vida le da un poco de luz, se reencuentra con Sofía. Sus cortos encuentros consiguen darle un leve toque de color a su triste vida, distanciado de su padre y su hermano. Aunque la mayor sorpresa de su vida estaba por llegar y ese momento será el verdadero, el que le hará conocerse y tomar las decisiones más importantes de su vida.

Esta gran novela, nos muestra lo importante que es asimilar las situaciones en su momento, dar la cara a los problemas y conseguir las metas que nos propongamos.

Hay veces en las que detenerse y mirar la vida es la mejor manera para tomar las mayores decisiones de nuestra vida.


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24/4/2013

Las palabras, vías de viaje


El ser humano tiene el don de la palabra. Su poder, hace transmitir ideas entre personas y generaciones. Nos hace conocer sitios, personas o situaciones que no hemos tenido que vivirlas en primera persona, solo nos basta con que alguien nos lo cuente y viajar allí a ese mismo momento.

Comenzar un libro es descubrir una nueva historia, un nuevo mundo, creado por una persona que nos invita a transportarnos con su relato a aquello que narra en sus páginas. Es un viaje que se realiza en mente, sin necesidad de moverse físicamente. La imaginación se pone en marcha y  rumbo al lugar en que nos sitúa el autor, en el que solo importa esa historia y que a través de las palabras nos hace erizar la piel. Nos transporta a ese lugar siempre que abrimos las hojas del libro como si de un mundo paralelo se tratase siempre a nuestra disposición.

Un buen libro es un momento de evasión de todo cuanto nos rodea en la vida cotidiana. Quién no tiene días en los que necesita desconectar, desvanecer y perderse en otros historias que pueden ayudar al verlo desde otro punto de vista de la historia, sin ser uno mismo el protagonista si no como meros telespectadores que ni pinchan ni cortan.

El día del libro es utilizado como pretesto para poder comprar un ejemplar y dedicar algo de tiempo a la lectura. Apena pensar que haya gente que solo se acuerde de adquirir un libro este día, pero como dice el refrán más vale algo que nada. Ojala hubiese más días en el año para concierciarnos de los beneficios y placeres que aporta la lectura. Considero que este día se celebre como agradecimiento a los autores, pilotos que nos hacen volar a viajes maravillosos.


1 comentario:

  1. Muy bonita la reseña del libro de Luis A. Santamaría. Con ganas de leerlo!!! :)

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